31 de agosto de 2012

DESOBEDIENCIA

Toc Toc -voy a cortar su luz-


QUEEEEEEEEEEEEEEE.

En serio, mi luz está domiciliada que disque para "evitar olvidos" así que no entendía nada, mientras trataba de explicar al muchachito que estaba perfectamente equivocado y que no era posible que yo tuviera un adeudo, el joven iba poniendo una barrera cada vez más áspera contra mi y yo, debo admitir con honestidad y vergüenza, también comencé a subir el tono de mi voz, que ya de por sí es algo estruendosa, mi dominio propio quedó escondido detrás del escritorio. Obvio me cortaron la luz, y así enfurruñada corrí rumbo a la comisión a resolver el problema.




Hacía un año, el espíritu me hablaba sobre un "arreglo" que me había hecho un electricista muchos años atrás (antes de tener el entendimiento que hoy tengo sobre lo lícito y lo que me aparta de la bendición de Dios) era esa vocecita que me decía, ¡oye!, este recibo de luz no es correcto, debes "desarreglar" lo que hizo el electricista; pero claro que con el pretexto de que, ni idea de que o donde lo había hecho, pues dejaba pasar el recibo hasta el siguiente bimestre que la vocecita volvía a recordarme que yo estaba tomando más de lo que estaba reportando.



Mientras iba rumbo a la CFE toda aquella "indignación" comenzó a ser remplazada por un sentimiento de culpa y temor, -- y si me descubrieron? y si me van a cobrar una megamulta? y si....... --   Llegando a las oficinas, me reporté a cajas para preguntar de que era ese adeudo y pagarlo, el adeudo tenía un año, (de alguna forma el banco y la comisión "brincaron" un pago, ¡un año!, el año que yo había estado ignorando al que me decía ¡deja de hacer lo que no es correcto!.

Como no entendían por que el sistema no se había dado cuenta de este adeudo por todo ese tiempo, me mandaron re-conectar al día siguiente, sin costo. Así que regresé a mi casa, dando gracias a Dios por Su favor a pesar de mi actitud al principio de todo ésto. Ésa tarde seguía escuchando la voz que me decía, no es correcto lo que haces con la luz, yo realmente no sabía que era lo que se había hecho, ni donde, pero bien podía haber buscado alguien que me dijera cómo solucionarlo, aún así, seguí haciendo caso omiso, y al día siguiente que llegaron a re-conectar me notificaron que era acreedora a una multa por robo de energía eléctrica. La cosa se puso fea realmente, al final, Dios intervino a mi favor, una vez más, y las cosas no fueron tan graves como se me habían planteado, pero pasé un gran susto.





Muchas veces hacemos cosas que no están bien, algunas veces por desconocer, y algunas otras por restarles importancia, me acuerdo en un trabajo que tenía hace algunos años, donde una de las secretarias se llevaba material de papelería y justificaba diciendo que a nadie le iba a faltar y además se lo debían por las horas extras que trabajaba sin pago, cuando vas al mandado, ¿has visto las bolsas de dulces abiertas? la gente piensa que por sacar 1 dulce no hace daño, al fin y al cabo no se está robando la bolsa;  hay muchas formas de robar, la gente roba tiempo al ser impuntual, roba autoestima al etiquetar mal a alguien, roba recursos al "puentear" la luz, roba al no pagar el agua, al no declarar impuestos, o no regresar el cambio que te dieron de más, cuando compras algo pirata, en fin, un robo no es necesariamente un asalto a mano armada, o robar de tal cantidad hacia arriba, un robo es un robo y se acabó. Y esto es ilícito, y te aleja de Dios y de Su bendición.


Pero El no es como tu o como yo, no está esperando que cometas un error, para acusarte y condenarte, te da la oportunidad de que resuelvas las cosas, que te redimas, que obedezcas, te habla de múltiples formas; a través de personas, con la "vocecita", en sueños, en los anuncios de televisión, en libros, etc. Y si tu pones atención a éste llamado, y lo corriges a tiempo, las consecuencias no serán lo graves que podrían ser, a mi me dio un año completo para corregirlo, pero no quise escuchar, tuve que pagar la consecuencia de mi desobediencia, algunas veces sólo tendrás una oportunidad de cambiar lo que no está bien, aprovéchala.

No dejes de recibir la bendición que Dios tiene para ti, por ahorrarte unos pesos, incluso unos miles, te puedo asegurar con plena convicción que si tu obedeces a la instrucción, la recompensa será aún mayor que lo que hayas "sacrificado"




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